Netflix nos ha traído este último mes una serie de
espionaje moderno, con pretensiones cerocerosietescas, que no está mal. Palomas Negras
De producción británica, nos han contado la primera
aventura en 6 episodios. Ésta va a tener segunda temporada fijo, pero ya será
otra historia. Es decir, que no nos dejan colgados en el último capítulo con
algo que vaya a dar continuidad a la primera trama.
Se deja ver y también es ideal para las aburridas tardes
de Navidad (ya casi que no) o año nuevo.
La prota, Helen Webb, es fichada por una extraña compañía
dedicada al espionaje y al tráfico internacional de información y acaba
colocada muy cerca del gobierno británico, lo que le permite obtener megabytes
de información interesante.
El embajador Chino en Londres aparece muerto en su embajada. Los chinos no se creen la versión oficial del accidente y creen que están los americanos detrás de la muerte. Además, la hija del embajador ha desparecido.
Crisis internacional y tercera guerra mundial en ciernes.
Paralelamente, mueren tres personajes en torno a los que
girará la historia.
Helen tenía una especial relación con uno de los muertos
y se propone descubrir por qué se han cargado a los tres, entrelazándose estas
muertes con la historia de los chinos.
Prota que reparte a lo Chuck Norris, con un compañero, Sam, que
te llevarías a la cama para acariciarlo, pero que mata que es un gusto porque,
entre otras cosas y sin acritud, se dedica a matar profesionalmente.
Serie fresquita e interesante. Acción, tiros, leches,
bromitas de malos y un poco de pasteleo por el muerto y la prota.
El tráiler en español:
Y el tráiler en inglés:
TÍTULO
ORIGINAL: BLACK DOVES
REPARTO
PRINCIPAL: KEIRA KNIGHTLEY, BEN WHISHAW, SARAH LANCASHIRE